sábado, julio 04, 2009

Si pusiese un ladrillo a mi alrededor por cada cosa fantástica, intensa, graciosa, sublime o desesperante que he pasado desde que decidí dar un paso al tiempo que me daba para descansar, hubiese ya formado una enorme muralla. Una mole de bloques que habríanme de rodear, esperando un empujón para aplastarme.

Bueno, tan trágico no seria, aun así, tengo esa fastidiosa sensación que tomar el control remoto, presionar el botón de retroceso y llegar hasta cada uno de aquellos momentos que me gustaría registrar, aplicar el ‘pause’ y grabarlos de cualquier forma posible. Pero esa es una posibilidad que tal vez solo la metafísica puede hacer realidad. Piedras arrojé al pozo, ondas se formaron y en poco tiempo todo regresó a su tranquilidad…

Entré a esa agobiante fase llamada exámenes finales, dentro de poco estaré lastimando mi cuerpo para soportar jornadas de desvelo y rogando a fuerzas invisibles para que me ayuden a aprobar los cursos XD. Sea lo que sea que venga, pasará y podré, luego de eso, respirar.

3 comentarios:

A.C. dijo...

Los exámenes finales tienen algo positivo: son, si te va bien, el último paso de la materia. jeje Te invito a visitar mis ideas, saludos!

Clarissa Guerra dijo...

Saudades de você!

A.C. dijo...

Gracias por pasar, buena onda la suya! Espero esté bien, saludos de una loca